Nuestra principal materia prima nace de la tierra. Mejor dicho: en la tierra. ¿Cómo no íbamos a trabajar por compatibilizar nuestra actividad industrial con el respeto con el medio ambiente? Y no porque sea ahora un elemento más que sumar al marketing de una empresa, sino porque estamos concienciados de que si no cuidamos nuestro entorno natural no podremos disfrutar como se merece de las maravillas en forma de alimentos que nos da la tierra, en nuestro caso, patata de cultivo andaluz y otros puntos del territorio nacional.
Con nuestro tubérculo favorito hacemos “simplemente papas fritas” que elaboramos en unas grandes freidoras, cuyo aceite es calentado por unas calderas que funcionan con biomasa. Y así lo hacemos desde hace cuatro años, cuando en el Tío de las Papas apostamos por usar los huesos de aceituna como combustible.
A la fábrica llegaron unos jóvenes que tenían una visión muy clara de cómo aplicar la biomasa al uso industrial, y tras unos estudios y pruebas con una freidora, comprobamos que nuestros quemadores podían mantener una temperatura estable. De esta forma se conseguía mantener la calidad del aceite y, por lo tanto, de las patatas fritas, reduciendo además el nivel de contaminación, de la mano de unos emprendedores que hoy en día han consolidado su compañía: H2O Renovables
Esas mismas patatas fritas, que ya estaban reduciendo su huella ecológica en su elaboración, acaban en unos envases que, como invitamos desde aquí, hay que echar en el contenedor amarillo para su posterior reciclaje. Una labor de la que se encarga Ecoembes, entidad a la que estamos adheridos, continuando así nuestro compromiso con el medio ambiente.
Y nuestro último paso hacia esa meta y seguir siendo más eficientes energéticamente ha sido la instalación de 50 placas fotovoltaicas en la cubierta de nuestra nave en el Polígono Industrial de Sierra de Yeguas, para la generación de energía eléctrica.
No sólo trabajamos para hacer nuestros productos con los estándares de calidad que querríamos para las patatas fritas y los aperitivos que nos gusta degustar. También hacerlo con el mayor respeto por el medio ambiente. Y esto, es un objetivo de todos.
